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Diagnóstico de eficiencia energética (DPE): Todo lo que necesita saber

El Diagnóstico de Rendimiento Energético, comúnmente conocido como DPE, se ha convertido en una parte esencial del panorama inmobiliario francés. Tanto si es propietario, inquilino, vendedor o comprador, comprender este diagnóstico es esencial si quiere tomar decisiones informadas sobre su vivienda. En este completo artículo le explicamos todo lo que necesita saber sobre el PED, su funcionamiento, su importancia y sus implicaciones prácticas.
Contenido
- ¿Qué es el diagnóstico de rendimiento energético?
- ¿Por qué es obligatorio un DPI?
- ¿Cómo se lleva a cabo un DPI?
- Las diferentes clases de energía del PED
- ¿Cuáles son las consecuencias del PED para los pisos térmicos?
- ¿Cuál es el periodo de validez de un DCE?
- ¿Cuánto cuesta un ECD?
- ¿Cómo puedo mejorar la calificación energética de mi vivienda?
- El ECD y el valor de la propiedad
- Conclusión
¿Qué es el diagnóstico de rendimiento energético?
El Diagnóstico de Rendimiento Energético es un documento oficial que evalúa el consumo energético y el impacto medioambiental de un inmueble. Obligatorio desde 2006, ha sido objeto de una importante revisión en 2021 para hacerlo más fiable, fácil de leer y legalmente exigible.
El PED adopta la forma de un informe detallado que contiene dos etiquetas principales: la etiqueta energética, que indica el consumo anual de energía de la vivienda, y la etiqueta climática, que mide las emisiones de gases de efecto invernadero. Estos dos indicadores se clasifican en una escala de la A (muy eficiente) a la G (muy intensiva en energía).
El principal objetivo del PED es informar a los futuros ocupantes sobre el rendimiento energético del inmueble y sensibilizarles sobre las cuestiones medioambientales. También ayuda a identificar los trabajos de renovación energética que deben priorizarse para mejorar el confort y reducir las facturas de energía.
¿Por qué es obligatorio un DPI?
El requisito del DCE forma parte de un enfoque global de la transición energética y la lucha contra el cambio climático. Francia se ha comprometido a reducir drásticamente sus emisiones de gases de efecto invernadero, y el sector de la construcción representa casi el 45% del consumo nacional de energía y alrededor del 25% de las emisiones de CO2.
El PED es obligatorio en varias situaciones: cuando se vende una propiedad, debe facilitarse en cuanto se pone a la venta y adjuntarse al contrato de compraventa. En el caso de un contrato de alquiler, el propietario debe adjuntarlo al contrato cuando lo firme. También es obligatorio para las nuevas construcciones y debe figurar en los anuncios inmobiliarios, ya sea en línea o en las agencias.
Esta obligación permite a los compradores e inquilinos comparar las propiedades en función de su eficiencia energética y anticiparse a los futuros costes energéticos. También anima a los propietarios a realizar obras de renovación para mejorar el valor de su propiedad.
¿Cómo se lleva a cabo un DPI?
El PED debe ser realizado por un diagnosticador certificado e independiente. Este profesional está certificado por un organismo acreditado y dispone de un seguro de responsabilidad profesional.
Durante la visita, el diagnosticador examinará la propiedad en detalle. Registra las características del edificio: superficie, orientación, aislamiento de paredes, tejado y suelos, tipo de acristalamiento, presencia de puentes térmicos. A continuación, analiza los sistemas de calefacción, producción de agua caliente sanitaria, ventilación y aire acondicionado. También tiene en cuenta el año de construcción del inmueble y las reformas realizadas.
A continuación, todos estos datos se introducen en un software regulado que calcula el consumo teórico de energía y las emisiones de gases de efecto invernadero. A diferencia del antiguo PED, el nuevo cálculo se basa en un método único y normalizado, lo que garantiza una mayor fiabilidad y comparabilidad de los resultados.
La visita suele durar entre una y tres horas, dependiendo del tamaño y la complejidad de la propiedad. A continuación, el diagnosticador presentará su informe en unos días.
Las diferentes clases de energía del PED
El PED clasifica las viviendas en siete categorías, de la A a la G, según su consumo energético expresado en kilovatios-hora por metro cuadrado y año.
Las viviendas con calificación A son las más eficientes, ya que consumen menos de 70 kWh/m²/año y emiten menos de 6 kg CO2/m²/año. Por lo general, se trata de edificios nuevos que cumplen las normas RT 2012 o RE 2020, o de edificios que han sido objeto de una renovación energética completa.
La clase B corresponde a viviendas muy eficientes energéticamente, con un consumo de entre 70 y 110 kWh/m²/año. Las clases C y D incluyen viviendas con un rendimiento energético medio, que consumen entre 110 y 250 kWh/m²/año.
Las clases E, F y G designan las viviendas de alto consumo energético, también conocidas como "pisos térmicos". La clase G, la más desfavorable, se refiere a los inmuebles que consumen más de 420 kWh/m²/año o emiten más de 100 kg CO2/m²/año. Estas viviendas son especialmente caras de calentar y a menudo presentan problemas de incomodidad térmica.
¿Cuáles son las consecuencias del PED para los pisos térmicos?
La lucha contra la calefacción deficiente se ha convertido en una prioridad nacional. Estas viviendas con calificación F o G representan alrededor del 17% del parque francés de viviendas y plantean graves problemas en términos de pobreza energética e impacto medioambiental.
Desde 2023, las viviendas que consumen más energía están sujetas a restricciones progresivas. Se ha prohibido alquilar inmuebles que consuman más de 450 kWh/m²/año. Esta prohibición se ampliará a las viviendas de categoría G en 2025, a las de categoría F en 2028 y a las de categoría E en 2034.
Estas medidas obligan a los propietarios a realizar obras de renovación energética para poder seguir alquilando sus inmuebles. La congelación de los alquileres de los pisos de calefacción también se aplica en algunas zonas de alta tensión.
Existen varias formas de ayuda financiera para ayudar a los propietarios a realizar estas obras: MaPrimeRénov', Certificados de Ahorro Energético, eco-PTZ y subvenciones de las autoridades locales. Es aconsejable contar con la ayuda de un asesor de France Rénov' para identificar las obras prioritarias y aprovechar al máximo las subvenciones disponibles.
¿Cuál es el periodo de validez de un DCE?
El DCE es válido durante diez años a partir de la fecha en que se produce. Sin embargo, existen excepciones para los DPI realizados antes de la reforma de 2021. Las DCE realizadas entre el 1 de enero de 2013 y el 31 de diciembre de 2017 fueron válidas hasta el 31 de diciembre de 2022. Los realizados entre el 1 de enero de 2018 y el 30 de junio de 2021 son válidos hasta el 31 de diciembre de 2024.
Es importante tener en cuenta que un propietario puede decidir realizar un nuevo PED antes de que caduque el anterior, sobre todo si ha llevado a cabo importantes obras de renovación energética. A continuación, se realizará un nuevo diagnóstico para evaluar estas mejoras y obtener potencialmente una mejor calificación energética.
El propietario debe conservar el DPE y transmitirlo a los futuros compradores o inquilinos. En caso de venta, la ausencia de un DCE puede dar lugar a la anulación de la transacción o a una reducción del precio de venta. Si la vivienda se alquila, el propietario se expone a una multa de hasta 3.000 euros.
¿Cuánto cuesta un ECD?
El precio de un ECD suele oscilar entre 100 y 250 euros, dependiendo de una serie de factores. El tamaño de la propiedad tiene un impacto directo en el precio, ya que un estudio cuesta menos que una casa grande. La situación geográfica también influye, ya que los precios suelen ser más elevados en la región parisina o en las grandes ciudades.
El tipo de propiedad y su complejidad también afectan al precio. Un piso en un bloque de viviendas será por lo general menos caro que una casa unifamiliar que requiera el análisis de varios sistemas de calefacción. Por último, los precios pueden variar de un diagnosticador a otro, por lo que merece la pena comparar varios presupuestos.
El coste de la DCE corre a cargo del vendedor o arrendador. Es aconsejable no elegir únicamente en función del precio más barato, sino decantarse por un diagnosticador certificado, experimentado y con buenas recomendaciones. Un EPD mal realizado puede llevar a una subestimación o sobreestimación del rendimiento energético, con importantes consecuencias financieras.
¿Cómo puedo mejorar la calificación energética de mi vivienda?
Mejorar la calificación DPE de su vivienda implica varios tipos de trabajos de renovación energética. El aislamiento suele ser la prioridad, ya que puede reducir significativamente la pérdida de calor. El aislamiento del ático y del tejado puede ahorrar hasta un 30% en las facturas de calefacción. Aislar las paredes por fuera o por dentro también es muy eficaz, al igual que sustituir las ventanas de acristalamiento sencillo por otras de doble o triple acristalamiento.
El sistema de calefacción es otra palanca importante. Sustituir una vieja caldera de gasóleo o gas por una bomba de calor, una caldera de condensación o un sistema de energía renovable puede mejorar significativamente la eficiencia energética. Instalar un calentador de agua termodinámico para producir agua caliente sanitaria también es beneficioso.
A menudo se descuida la ventilación, pero sigue siendo esencial. Un sistema CMV de doble flujo renueva el aire al tiempo que recupera el calor, mejorando el confort y la eficiencia energética.
Es aconsejable realizar una auditoría energética antes de emprender cualquier obra importante. Esta auditoría, más exhaustiva que la DPE, propone un plan de renovación por fases, dando prioridad a las acciones más rentables. Existe una amplia gama de ayudas financieras disponibles para cubrir una parte importante de estos trabajos, lo que hace que la renovación energética sea accesible a un mayor número de propietarios.
El ECD y el valor de la propiedad
La DPI tiene un impacto directo y creciente en el valor de las propiedades. Los estudios demuestran que una propiedad bien clasificada se vende más rápidamente y a mejor precio que una que no sea eficiente energéticamente. La diferencia de precio entre una propiedad con calificación A o B y otra con calificación F o G puede llegar a ser del 10 al 20%, según la región y el mercado local.
Los compradores son cada vez más sensibles a la cuestión del rendimiento energético, entre otras cosas debido al aumento de los precios de la energía y a la creciente concienciación medioambiental. Una buena DEP se ha convertido en un importante argumento de venta, mientras que una mala calificación a menudo obliga a negociar a la baja o directamente repele a ciertos compradores.
Para los inversores en alquiler, la clase energética se ha convertido en un criterio clave. Con la prohibición gradual de alquilar inmuebles resistentes al calor, un inmueble clasificado F o G representa un riesgo financiero importante, que requiere obras costosas. Por otro lado, una propiedad de alto rendimiento es más rentable a largo plazo y aumentará el valor de sus activos.
Los profesionales inmobiliarios aconsejan ahora a los vendedores que planifiquen con antelación y lleven a cabo las obras de renovación energética antes de poner su propiedad a la venta, con el fin de optimizar el precio de venta y acelerar la transacción.
Conclusión
El Diagnóstico de Rendimiento Energético es mucho más que una simple formalidad administrativa. Se ha convertido en una herramienta central de la política energética francesa y en un factor determinante en todas las transacciones inmobiliarias. Comprender el PED, sus implicaciones y cómo mejorar su calificación ayudará a los propietarios a aumentar el valor de su vivienda y a los inquilinos a elegir un alojamiento cómodo y económico.
Con el progresivo endurecimiento de la normativa sobre defectos térmicos, la renovación energética ya no es una opción, sino una necesidad. Las numerosas subvenciones disponibles hacen más accesible este trabajo, que constituye una inversión rentable a medio y largo plazo, tanto desde el punto de vista económico como medioambiental.
Preguntas más frecuentes
La tienda domeashop le ofrece una lista de preguntas y respuestas correspondientes a las preguntas más frecuentes relacionadas con el tema y los productos tratados en este artículo. Si no encuentra la respuesta a su pregunta, póngase en contacto con nosotros y nuestros especialistas estarán encantados de responderle.
Sí, el DPE es obligatorio para cualquier venta o alquiler de una propiedad, ya sea una casa, un piso, un local comercial o incluso un alojamiento amueblado. Debe suministrarse cuando la propiedad se pone a la venta o en alquiler y adjuntarse al contrato. Las únicas excepciones son algunos edificios específicos como las estructuras temporales, los edificios independientes de menos de 50 m², los monumentos históricos y los lugares de culto.
Si su vivienda está clasificada como F o G, debe planificar algunas obras de renovación energética, sobre todo si es propietario. Comience realizando una auditoría energética para identificar las obras prioritarias. Infórmese sobre las ayudas financieras disponibles, como MaPrimeRénov', eco-PTZ o CEE, que pueden cubrir una parte importante de los costes. Pida ayuda a un asesor de France Rénov' para sacar el máximo partido a su proyecto y respetar los plazos legales de prohibición de alquiler.
Sí, si cree que su DPE contiene errores, puede impugnarlo. Empiece por ponerse en contacto con el servicio de diagnóstico para informar de cualquier fallo que encuentre. Si el desacuerdo persiste, puede remitir el asunto al organismo de certificación del diagnosticador. Como último recurso, la mediación o la acción judicial siguen siendo posibles. Desde la reforma de 2021, el DPE es exigible, lo que significa que el diagnosticador es profesionalmente responsable y puede ser procesado en caso de que se demuestre que un error ha causado daños.
No, el PED no se basa en su factura energética real, sino en un consumo teórico normalizado. Evalúa el rendimiento intrínseco del edificio y su equipamiento en condiciones de uso normalizadas. Este método permite comparar las viviendas de forma objetiva, independientemente de los hábitos de consumo de sus ocupantes. Esto significa que dos personas que vivan en el mismo hogar pero se comporten de forma diferente tendrán los mismos resultados de ECD.
Al vender una propiedad, siempre es el vendedor quien debe hacer realizar y pagar la DPI. Del mismo modo, es el propietario quien corre con los gastos cuando la propiedad se alquila. El PED debe entregarse al comprador o al arrendatario antes de la firma del contrato. Por lo tanto, la obtención de este diagnóstico no supone ningún coste para el comprador o el inquilino. El coste del DCE no puede recargarse ni incluirse en los costes de transacción.
Sí, existe una amplia gama de subvenciones disponibles para financiar la renovación energética. MaPrimeRénov' es la principal forma de ayuda gubernamental, disponible para todos los propietarios de viviendas, con importes que varían en función de los ingresos y de las obras realizadas. El eco-préstamo a tipo cero le permite pedir prestados hasta 50.000 euros sin intereses. Los Certificados de Ahorro Energético ofrecen bonificaciones o reducciones por parte de los proveedores de energía. El tipo reducido del IVA del 5,5% se aplica a los trabajos de renovación energética. Algunas autoridades locales también ofrecen apoyo adicional.
Para elegir un diagnosticador fiable, compruebe primero que tiene una certificación válida, que puede consultar en el directorio oficial de diagnosticadores. Asegúrese de que dispone de un seguro de responsabilidad profesional. Elija un profesional independiente, sin vínculos con una agencia inmobiliaria o un vendedor. Compare varios presupuestos y consulte las opiniones de los clientes. Tenga cuidado con los precios anormalmente bajos, que pueden ocultar un diagnóstico chapucero. Un buen diagnosticador se tomará el tiempo necesario para examinar su casa a fondo y responder a sus preguntas con claridad.
Esto depende de la fecha de su DCE. Las DCE realizadas entre el 1 de enero de 2018 y el 30 de junio de 2021 son válidas hasta el 31 de diciembre de 2024. Las DCE realizadas entre el 1 de julio de 2021 y hoy ya siguen el nuevo método y son válidas durante 10 años. Si su EPD se realizó antes de 2018, ya no es válida y debe hacerse una nueva con el método actual antes de cualquier venta o alquiler.
Los principios del DPE son idénticos para todos los tipos de propiedad, pero el método de cálculo se adapta a las características específicas de cada propiedad. En el caso de un piso, el diagnosticador debe tener en cuenta las zonas comunes del edificio si influyen en el rendimiento energético del inmueble. En el caso de una vivienda unifamiliar, el análisis suele ser más complejo, ya que implica examinar toda la envolvente del edificio, el terreno y el equipamiento específico. El precio de un ECD suele reflejar esta diferencia de complejidad.
Sí, no sólo puede, sino que incluso es muy recomendable después de un trabajo importante de renovación energética. Una nueva EPD mostrará las mejoras realizadas y potencialmente conducirá a una mejor calificación energética. Esto aumentará el valor de su propiedad y facilitará su venta o alquiler en el futuro. Espere a que hayan finalizado todas las obras antes de realizar el nuevo diagnóstico para obtener la mejor evaluación posible. El nuevo DPE sustituirá al antiguo y tendrá una validez de 10 años.
